Los años 70′ nos han dejado innumerables recuerdos que todavía tenemos hoy en día muy presentes. Nada que ver su forma de vestir con la de ahora, pero no hay que olvidar que muchos de sus estilos, tanto hippies, rockeros o punkies marcaron tendencia y ahora lo podemos seguir viendo en nuestras calles.
Son muchos los diseñadores que ha apostado por rescatar elementos y prendas de las décadas de los 60’, 70’ y 80’ y es que estamos de acuerdo con que la moda es cíclica, pero en constante evolución. Los cambios son evidentes y cuando echamos un vistazo notamos esa diferencia, aunque muchas de sus prendas las volvemos a tener en nuestros armarios con un matiz un poco más moderno.
Los pantalones acampanados
Los pantalones acampanados marcaron mucha tendencia en esta década. Fueron usados con todo orgullo por todas las clases sociales,. Tanto ricos como pobres, los llamados hoppers, o incluso los influencers de aquella época como los hooligans de fútbol, Tom Jones o David Bowie.
Esta moda se ha postulado en muchas épocas y en estos años ha querido puntualizarse, pero no lo ha hecho de forma resistente. Los pantalones acampanados siguen gustando mucho y su forma de llevarlos estiliza mucho la figura, se llevan con cualquier calzado y son ideales para llevar a cualquier acontecimiento.
Estos pantalones fueron protagonistas y en los años 80’ lo fueron mucho más, ya que su campana era todavía más ancha. Los zapatos que mejor acompañaban siempre eran los de plataforma, una idea inspiradora para los que eran bajitos y un toque distinto a la forma de vestir.
Estilo hippie y bohemio
En general se adoptó por un estilo más étnico lo que derivó al estilo hippie. Las camisas de gasa indias, los ponchos mejicanos, las chaquetas chinas, los dashikis africanos y los caftanes fueron todas esas prendas que se usaron incluso en muchas culturas y países.
Se despertó un gran interés por la vida rural y todo lo relacionado con el arte y la artesanía. La gente vestía prendas sencillas con ese aire campesino y formalizando este estilo hippie, con camisas sueltas. Los vestidos que se usaban incluso para bodas se copiaban del estilo victoriano y eduardiano y se combinaban con sandalias, zuecos o botas.
Las camisas son multi coloridas, con el uso de chalecos, el pelo se llevaba largo, rizado y sin restricciones: algunos incluso apostaban por el pelo afro y con bandas en la cabeza. El uso de anillos y collares también fue exagerado, eran muy populares los complementos.
Moda Disco
Las discotecas y la música dance o “disco” puso esa puesta en marcha para inventar el glamour. Se llevan los pantalones ajustados y anchos tanto en hombres como mujeres, con telas brillantes y casi todo decorado con lentejuelas. Las camisas siempre metidas por dentro del pantalón, de tallaje ajustado al cuerpo y desabrochadas hasta la mitad. Los complementos que más acompañaban eran los collares de oro y los medallones.
Estilo Casual
Viendo su indumentaria podemos destacar muchas características. Los hombres también vestían con cinturones atados por encima de los jerséis. Las cinturas se marcan muy altas, con prendas de muchos estampados y coloridos extravagantes y la ropa interior no tiene tapujos en ser escandalosa y reveladora.
Se marcó tendencia en llevar prendas de lavar y poner, sin pasar por la zona de planchado. Esto se puso de moda gracias a la fabricación de los tejidos sintéticos y el uso del poliéster. Hoy en día también podemos encontrar muchos de estos materiales, pero con otro corte diferente. Algunos trajes se diseñaban para poder ser lavados, secados y puestos, sin pasar por la plancha, una innovación para todas las personas que les gustaba viajar y sacar la ropa de sus maletas sin ninguna arruga. Las camisas se vuelven a formalizar en este estilo casual siendo apretadas al cuerpo, metidas por dentro y desabrochadas.
La moda Punk
Esta moda también llegó a su esplendor, por llevar un estado difícil de superar y dónde se proclamó una reacción social. Fue un icono revelador de la cultura hippie y de las sociedades mucho más altas, dónde el Punk abrazó lo sucio de la sociedad rodeado de gente de clase mucho más baja.
Su forma de vestir es muy peculiar y fácil de reconocer, sus pantalones eran estrechos en los hombres con la particularidad de llevarlos rotos, al igual que las mujeres. Algunas no vestían pantalones y se armaban con esas faldas con medias de rejilla, negras y llenas de agujeros. Todo ello revelaba la situación de gente marginada, desempleada y con un futuro oscuro.
Los pantalones también se complementaban con grandes cremalleras, tachuelas y correas; el calzado era esas enormes botas de trabajo algunas con enormes plataformas. Y no olvidemos sus peinados tan significativos, llevaban unas enormes crestas o cabellos despeinados y peinados hacia arriba, teñidos con colores brillantes y llamativos. El maquillaje acentuaba ese aspecto siniestro con caras pálidas y ojos maquillados de negro.