Un traje, por elegante que sea, no tiene la misma vistosidad si no va acompañado de unos buenos zapatos. Es muy importante elegir correctamente el calzado para hombre, pues forma parte de la personalidad y de la imagen que transmitimos a los demás.
La importancia de tener el calzado limpio es clara. Tener los zapatos descuidados generan una sensación de abandono y dejadez. La limpieza de nuestro calzado debe estar entre la rutina diaria.
El calzado limpio. La limpieza diaria
Hay muchos tipos de calzado y está fabricado a partir de diferentes materiales: cuero, tela, charol, gamuza, etc. Cada uno de estos materiales tiene un sistema de limpieza diferente. Para todos ellos hay productos específicos, como es el caso de jabones, cera de protección, cepillos y utensilios adecuados, etc.
El almacenaje correcto
Entre los factores que influyen para prolongar la vida útil en el calzado, está la cuestión de cómo guardarlos. Si los tenemos en su caja, desde la compra, los zapatos se mantendrán en buen estado y estarán protegidos del polvo.
Los zapatos tienden a deformarse. Para evitarlo, podemos tenerlos con la horma que viene cuando los compramos, o utilizando bolas de papel de periódico.
La importancia del calzador
El uso del calzador no solo es útil para facilitar nuestra comodidad al ponernos los zapatos. También para evitar que se deformen, a base de poner y quitar.
Un uso alternativo para el calzado
Si queremos conservar el calzado en un estado óptimo, evitaremos su uso durante dos días seguidos. Lo ideal es alternar dos pares de zapatos y su uso durante los días de la semana.
La humedad
La humedad provoca el efecto de deformar los zapatos. En temporada de lluvia, por ejemplo, lo mejor es usar botas. En el supuesto de que ya se hayan mojado los zapatos, el mejor truco es introducir papel de periódico dentro de ellos, para que absorba la humedad.
Recambio de suelas y tapas
Cuando empecemos a notar que las suelas y las tapas de nuestros zapatos se están desgastando, lo ideal es llevarlos al zapatero para que sustituya esas partes desgastadas.
Fuentes imágenes: Cicasa /