En los últimos tiempos, hemos presenciado como la clásica camisa de cuadros sufría variaciones para convertirse en una prenda más sofisticada dentro de lo que cabe, pero lo que está claro es que más o menos evolucionadas, las camisas de cuadros son una prenda que no puede faltar en nuestro armario, sobre todo en entretiempo.
Para esta nota, hemos preparado una selección de camisas de cuadros de Pull and Bear con las que podrás seguir la tendencia de abotonártela hasta el cuello o sorprender con combinaciones de colores atrevidos.
Diseñado para facilitar abotonarla hasta el cuello, este modelo con el estampado clásico combinará genial con un pantalón de pitillo negro, aunque también se presta a llevarla abierta.
La ligereza de esta otra nos permitirá llevarla abierta con una camiseta en un tono claro debajo sin ningún tipo de problema. Perfecta para esos días de entretiempo en los que no hace ni frío ni calor.
Al igual que la primera, queda genial abotonada hasta el cuello, aunque no tiene tanta versatilidad. En nuestra opinión al menos, no queda tan bien abierta con una camiseta debajo como las anteriores.
En esta otra destaca el contraste entre su corte clásico (más holgada y cuello normal) y su atrevida combinación de colores en tonos pastel. La llevaremos abierta con una camiseta oscura debajo.
Guía de estilo y compra en Pull&Bear
Además de estas camisas de cuadros, en Pull&Bear tienes opciones para afinar tu elección según fit (slim o classic), tejidos (algodón, lino, poliéster) y manga corta o larga. Considera el cuello mao para un toque casual elegante y úsala como sobrecamisa cuando refresca. En estampados, el cuadro convive con rayas verticales, flores, cadenas, animal print (leopardo/serpiente), geométricos y guiños retro/vintage o hawaianos. Para la oficina funcionan los colores neutros (blanco, negro, azul claro); si buscas un look más creativo, juega con liso vs. estampado. En mujer, también hay camisas y blusas con cortes oversize, manga francesa o anudadas, y detalles como volantes, mangas abullonadas, cuellos asimétricos, transparencias o cut-outs. Combina cuadros con falda midi negra lisa, falda vaquera larga o minifalda de cuadros; con pantalón, los jeans y unos oxford no fallan. Para planes casuales incluye bermudas, cargos o baggy y, en eventos formales, suma americana. En días cálidos, renueva con camisetas y shorts, y remata con sudadera o jersey cuando caiga la tarde.
El print de cuadros sigue ganando terreno por su atemporalidad y facilidad para integrarse en looks formales e informales, abotonada hasta arriba o abierta como capa ligera.
Looks y combinaciones para cada ocasión
Si prefieres prendas monocolor, aprovecha su versatilidad para combinarlas con inferiores estampados o lisos; el cuadro hará de protagonista en capas exteriores.
En mujer, los cortes oversize, con hombro caído o anudados a la cintura, conviven con mangas francesas y detalles como volantes, abullonados o transparencias. El animal print y los motivos de cadenas de inspiración ochentera y noventera son aliados si te apetece subir la intensidad del look.
Propuestas rápidas: camisa de cuadros + falda midi negra o falda vaquera larga con botines; con pantalón, jeans rectos y zapatos oxford para un aire preppy. Para planes casuales suma bermudas, cargos o baggy; si el plan es formal, añade americana estructurada.
En hombre, alterna básicas lisas (ideal como comodín) con estampadas —cuadros, rayas, hawaianas—. El cuello mao equilibra formalidad y desenfado. Practica el layering: camisa abierta como sobrecamisa con camiseta, sudadera y cazadora; completa con zapatillas, gorra, gafas de sol, riñonera o mochila.
En días cálidos, cambia a camisetas y shorts; cuando refresca, incorpora un jersey fino o una sudadera por debajo de la camisa de cuadros para mantener la estética sin perder comodidad.
Nuevos modelos y detalles de tendencia
Las sobrecamisas de paño o franela con cuadros siguen fuertes: corte oversize, caída en hombros y posibilidad de llevarlas abiertas. Muchas incorporan maxibolsillos y largos amplios que funcionan como capa intermedia en días fríos.
También verás diseños combinados en dos tejidos: parte inferior en tweed de tonos neutros y canesú/cuello en ante con flecos para aportar movimiento. Suelen llevar solapas, cierre de botones y corte amplio, perfectos para transformar looks básicos con originalidad. Pull&Bear acostumbra a ofrecer estos modelos en tallas habituales (de S a L o más, según referencia) y con precios contenidos, a menudo alrededor de los 40 €.
Para estilismos femeninos, prueba la sobrecamisa de cuadros con vestido largo o mini y botas de suela gruesa. En hombre, combínala con joggers o cargo y zapatillas para un aire urbano; cerrada y con pantalón de pinzas, eleva el conjunto.
Cómo elegir fit, tejido y cuidar tu camisa
Elige fit slim si buscas una silueta definida y classic si priorizas comodidad o layering. En tejidos, el algodón es transpirable y todoterreno; la franela aporta abrigo; el lino funciona en climas templados; las mezclas con poliéster mejoran resistencia y facilitan el planchado.
Para maximizar uso: abotona hasta el cuello con pantalón sastre y americana en entornos formales; abierta con camiseta neutra para un look casual. Si optas por estampados potentes (cadenas, flores, animal), equilibra con prendas lisas.
Cuidados básicos: lava del revés con agua fría y programa suave para preservar color y tacto; evita sobrecargar la lavadora; seca en percha para prevenir arrugas y, si planchas, usa vapor y temperatura acorde al tejido.
La camisa de cuadros de Pull&Bear encaja en cualquier agenda: de la oficina a un plan con amigos, con adaptaciones mínimas de fit, tejido y accesorios. Pocas prendas suman tanta versatilidad con tan poco esfuerzo.
