Peaking ¿conoces esta técnica?

Peaking

¿Dedicas tiempo a tus relaciones sexuales? ¿Crees que podrías mejorar tus relaciones probando nuevas técnicas? Quizás debes de conocer este nuevo,  desacelerar el objetivo de llegar a la cumbre, ser capaz de no llegar al orgasmo y disfrutar plenamente de ese momento lentamente. Hablamos del peaking, una técnica utilizada cada vez más y para los que se atreven a dar rienda suelta a sus relaciones sexuales.

Para los hombres resulta una práctica arriesgada y difícil de realizar, sobre todo cuando el cúlmine de un acto sexual se basa en llegar al orgasmo lo más rápido posible. Para otros, esta praxis puede resultar más atractiva o poco permisible para los que sufren de eyaculación precoz.

¿Qué significa Peaking?

Los vocablos ingleses se introducen en nuestra lengua y es lo que ocurre con esta palabra. Su significado es sencillo “llegar a la cima”, pero con una idea relativa. Según comenta la sexóloga Tracy Cox, sería una forma de alargar el sexo en la cama y evitar eyacular lo más pronto posible.

Es una práctica que se puede realizar entre ambos sexos, el hombre debería alargar su momento de clímax, permanecer más tiempo y así intensificar el orgasmo. Como su objetivo es retrasar el orgasmo lo máximo posible, se ha llegado a asociar al término “slow-sex” o lo que es lo mismo “disfrutar sin prisas”.

¿Has pensado dedicar tiempo a tus relaciones sexuales? Con el slow-sex se crea un acercamiento más placentero hacia tu pareja, se construyen muchos pilares que había descatalogados y cuando todo se había convertido en una rutina.

El orgasmo ya no asume tal protagonismo, lo dejaremos al final para dejar paso al juego, incluso los genitales pasarían a un segundo plano. En esta parte se trata de repartir el protagonismo en la búsqueda de la satisfacción sexual en otros planos. ¿Qué puede ser igualmente de satisfactorio? Las caricias o incluso una conversación.

Pareja en el suelo

¿Cómo se puede recrear el Peaking?

El peaking hay que trabajarlo, si estamos acostumbrados a pequeños preliminares, ir a la acción y culminar en el éxtasis… costará de primera mano realizalo. Las mujeres pueden mantener el orgasmo realizando hipopresivos para fortalecer el cuello pélvico y también hacer otro tipo de ejercicios para fortalecer el perineo.

Si se mantiene algunos de estos ejercicios se llegará al final intensificando los orgasmos femeninos. Entre las mujeres pueden variar sus orgasmos, ya que cada cual experimenta estos espasmos de una manera diferente, incluso se puede llegar a sentir de forma particular.  Para Cox, la sexóloga, se pueden buscar algunos sistemas, como pensar en otras cosas, como contar hasta 100, imaginar un lugar con mucha calma o incluso hacer la lista de la compra. Imaginativo, ¿verdad?

Los hombres también tienen que utilizar un poco de su tecnología, no es algo fácil, pero por intentarlo no se pierde nada. La fase de la excitación comienza por buen camino y el cuerpo ya se va preparando para el acto sexual.

Muchos expertos conocen este tipo de prácticas, las han estudiado a fondo, pero aún así, todo dependerá de la fortaleza de una persona. La idea radica en conocer nuestro cuerpo a fondo y poder darlo todo. Peaking es alargar el acto sexual y disfrutar de cada momento, se tiene que conocer el cuerpo y que las relaciones sexuales se alarguen en el tiempo. Hay que tener más control de las emociones y eso se lleva a cabo con la práctica.

Peaking

En el momento que se esté activando el botón del subidón orgásmico hay que estar atento a los estímulos del cuerpo y poder controlarlos. Es el momento de frenar y apagar por un momento ese momento de pasión. Se puede hacer una gran contracción del perineo y realizar profundas respiraciones, con este método, el placer se reparte mucho mejor por el cuerpo y no se concentra exclusivamente en un punto.

La carga erótica del ambiente también es importante cuando nos dejarnos llevar por el deseo. Por ello es importante jugar con nuestros sentidos, será la mejor herramienta para controlar los impulsos. Como indica la técnica del low-sex, la mejor lucha es centrar la atención a los genitales al final del acto.

Mientras llega la estimulación, poco a poco se va dando paso al momento del orgasmo. En esa parte, es fundamental hacerlo más suave y ralentizar la estimulación. Como ya hemos concretado en otros puntos, podremos alargar el momento del clímax.

¿El peaking se puede practicar solo en pareja?

El peaking es una práctica que se puede hacer en pareja, pero sin duda, se puede disfrutar sin ella. Hacerlo con personas es un momento especial, pero hacerlo en solitario también tiene sus ventajas. Si sufres de eyaculación precoz y no puedes contener que llegue más despacio el orgasmo, siempre se puede disfrutar en solitario, probando sin fronteras y sin miedo de ser juzgado. Lo importante es ir avanzando en conocerte de cerca y a ti mismo, practicando sin juguetes y las veces necesarias para tomarte el tiempo que sea necesario.


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