La cazadora vaquera con apliques atraviesa un momento de enorme popularidad desde que firmas como Gucci le dieran un acento chic y las relanzaran como un imprescindible de las chaquetas de entretiempo.
Si todavía no tienes la tuya, puedes comprar una ya hecha o personalizarla tú mismo siguiendo los pasos de la siguiente guía, obteniendo como resultado una pieza única que te permitirá expresar tu personalidad.
Elige una cazadora vaquera
El primer paso es decidir qué cazadora vaquera vamos a personalizar. Puede ser azul oscura, azul clara, negra, lisa, desgastada… Si tienes varios modelos en casa, lo más aconsejable es elegir aquella que más te favorezca (que por alguna razón siempre suele ser la más antigua). Y es que para customizar hay que invertir tiempo y dinero, por lo que lo más inteligente es asegurarse de que luego sacaremos partido a la prenda.
Reúne apliques
Si te has hecho con algunos parches a lo largo de los años, ha llegado el momento de darles uso. Si tienes que empezar de cero, ten paciencia. Dedica todo el tiempo que sea necesario a reunir parches y pins con los que decorar tu cazadora vaquera. No te conformes hasta estar completamente satisfecho con tu colección antes de lanzarte a la siguiente fase del proceso.
El secreto para acertar con la elección de los parches es que digan algo sobre tu personalidad (banda favorita, una ciudad que nunca olvidarás, frases o símbolos con los que te sientes identificado…). Otra opción es personalizarla siguiendo una temática determinada. Por ejemplo, basarse en los años 90, integrando en nuestra cazadora aliques de smiley, Nirvana, yin yang, MTV, alien verde, etc.
En lo referente a las tachuelas, queda a la elección de cada uno ponerle unas cuantas o prescindir de ellas por completo. Lo que más destaca son los parches, por lo que estas quedan relegadas a un papel secundario en forma de pequeños detalles aquí y allá. Si crees que mejorarán tu cazadora adelante, pero si sientes que en realidad no aportan nada a la prenda, mejor no las pongas.
Busca la disposición perfecta
Extiende la cazadora sobre una superficie plana y comienza a mover los parches hasta encontrar la disposición que más te satisfaga estéticamente. Toma una foto y repite la operación con el otro lado de la prenda si deseas decorarla por delante y por detrás. El error que cometen algunas personas es anteponer la cantidad a la calidad. Que no te importe si dejas algunos sin poner, ya que seguro que en el futuro encuentras les encuentras otro sitio. Tampoco debes preocuparte si te queda la sensación de obra inacabada. En realidad, eso es algo bueno. Dejar huecos para cosas que se te ocurran más adelante es una gran idea.
Remata el trabajo
Una vez que tienes tus apliques y sabes perfectamente qué lugar debe ocupar cada uno en tu cazadora vaquera, es hora de pasar a la última fase. Los pins y las tachuelas son por lo general muy fáciles y rápidos de integrar en la prenda. Los parches, en cambio, requieren de herramientas adicionales. Todo dependerá del método que elijas. El pegado con calor (plancha de la ropa) es la forma más rápida y sencilla. Si el parche no lleva pegamento, necesitarás aguja e hilo/máquina de coser o pegamento para tela.