Esta bastante extendida la idea de que los hombres no saben hacer disfrutar a la mujer en el sexo y que son los egoístas que tienen el orgasmo y las mujeres se quedan con las ganas. Es normal pensar que las mujeres son más complicadas dado que tienen «muchos botones o teclas» ahí abajo y es difícil saber dónde tocar. En los hombres es una tarea más fácil. Por lo que nunca te ofendas al pensar que las mujeres lo hacen mejor, solamente lo tienen más fácil. Para romper esa brecha que cree desventaja entre ambos sexos, aquí llega el manual de cómo masturbar a una mujer.
Te lo explicaremos todo, paso a paso para que aprendas bien los trucos para hacer que la mujer llegue al orgasmo fácilmente.
¿Tocar a una mujer es tarea difícil?
No todas las mujeres son iguales ni les gusta lo mismo. Esto hay que tenerlo en cuenta la hora de pensar de que todo lo que se diga aquí sirve para todas y cada una de las mujeres con las que consigas acostarte. Ni mucho menos. Para lo que a una mujer puede ser la bendición del placer a otra puede resultarle soso.
A pesar de que se cree que las mujeres tienen muchos botoncitos, tan sólo tienen uno que, al tocarlo, puedes hacer que una mujer llegue al clímax. Se trata del clítoris. A veces es difícil pensar lo que le está gustando a la mujer en ese momento, pero tan sólo es cuestión de practicar el conocer dónde debemos dar y ponerlo en práctica una y otra vez hasta mejorar la técnica.
Es importante comprender que la anatomía femenina es bastante delicada y que en esas zonas se encuentran montones de terminaciones nerviosas. Esto hace que el más mínimo roce pueda causar tanto placer como dolor. El clítoris se encuentra en el interior de la vagina y de ahí a que muchas veces durante la penetración se puedan estimular los brazos del mismo. Se trata de un órgano dedicado solamente al placer y que mide entre 8 y 10 cm.
Cómo tocar el clítoris
Lo que conocemos como clítoris es solamente el glande del clítoris como si de un pene se tratase. Es cierto que toda la vulva es sensible a las caricias y al taco, aunque es especialmente satisfactorio para las mujeres si la zona está lubricada. Para que esto ocurra, los preliminares son algo fundamental. Cuando estamos calentando al situación, la lubricación comienza a salir y es más fácil que tenga lugar y que nos sirva como ayuda para dar más placer. A veces esta lubricación tarda un poco en salir. Depende de la excitación de la mujer y de su genética.
En cuanto puedas, mete un poco el dedo en la entrada de la vagina, mójalo en la lubricación y comienza a tocar el clítoris. Si la mujer no lubrica bien o no quieres esperar a que se lubrique por sí sola, puedes utilizar algún gel lubricante o tu propia saliva.
No puedes dirigirte directamente al glande del clítoris hasta que no notes que los labios mayores ha aumentado de tamaño. Si haces esto, puede ser molesto si la mujer no está completamente excitada.
El movimiento más clásico es situar el dedo índice y corazón encima del clítoris y realizar movimientos en forma de círculos. También puedes probar a desplazar los dedos de un lado a otro y mover los dedos de arriba a abajo para generar roce y que a la mujer le vaya gustando.
Hay que asegurarse que la zona esté lubricada siempre en todo momento, o dejará de gustarle para molestarle. Lo ideal es mantener un contacto visual con la pareja para que os compenetréis mejor y suba el libido. Comprueba si lo que le estás haciendo le está gustando por cómo modifica su postura, hace ruidos o está completamente relajada. Si la mujer está tensa, hagas lo que hagas, no le gustará.
Y es que muchas mujeres se ponen nerviosas durante el sexo. Esto puede ocurrir porque no saben si van a darle placer al hombre, porque se sienten mal consigo mismas por su cuerpo, tienen vergüenza, etc. Hay mil y una razones por lo que la mujer se preocupa durante el sexo y se pone tensa. Si esto ocurre, no podrán llegar bien al orgasmo. Si estás con una mujer tensa, es mejor que le acaricies la pierna, la barriga o la beses mientras le masturbas.
Cómo masturbar a una mujer de una forma correcta
Con los dedos puedes ir recorriendo los labios mayores y menores para causarle más placer. Puedes separar los dedos índice y corazón para recorrer el interior hacia arriba o hacia abajo y siempre hazlo con cuidado. Los labios son muy placenteros y tan sólo hay que presionar un poquito y deslizar.
Olvida todo lo que ves en los vídeos porno. Al clítoris no hay que darle golpecitos ni mover las manos de un lado a otro como si estuviésemos tocando una guitarra. La velocidad a la que movemos las manos puede ser interesante, pero sin aplicar fuerza. Conforme aceleramos la velocidad a la que tocamos su clítoris estaremos aumentando la fuerza con la que lo hacemos sin quererlo.
Para las mujeres, que hagan esto es una de las peores pesadillas igual que a nosotros no nos gustaría que nos hicieran una paja súper rápida y con fuerza. El punto G es lo más indicado para comenzar a dar placer a una mujer. Cuando la mujer tenga ya una excitación alta, puede introducirle los dedos en su vagina pero sin llegar a penetrar por completo. Es excitante según muchas mujeres. De ahí a que digan «solo la puntita».
Puedes empezar introduciendo sólo un dedo y, si ves la vagina muy dilatada, puedes meter el otro. Toca directo al punto G. Para encontrarlo, es tan fácil como meter los dedos con las yemas hacia arriba y notarás el hueso pélvico. Es aquí donde tienes que tocar como si quisieras tocar el ombligo. Se puede hacer movimientos hacia un lado y hacia el otro como si estuvieras rebañando un bote de alguna salsa.
También puedes hacer un poco de presión en la zona, pero no olvides hacerlo con cuidado. El hecho de meter y sacar el pene no produce mucho placer a las mujeres (e incluso a algunas no le da ninguno). Por ello, céntrate siempre en la estimulación del clítoris. Cuando notes que está más excitada, aumenta el ritmo de la masturbación y verás que comienza a gemir o a mover la pelvis hacia abajo. Es entonces cuando llegará al orgasmo.
Espero que estos consejos te ayuden a saber cómo masturbar a una mujer.