Cómo protegernos de los rayos solares

rayos solares

Llega el buen tiempo y es tiempo de deportes y actividades de aventura, la playa, la piscina, etc. Durante esta época del año en la que el sol brilla a su máxima expresión, es importante tomar precauciones de los rayos solares, incluso mientras caminamos por la ciudad.

Para evitar riesgos en nuestra piel y en la salud en general, hay que tener en cuenta algunos consejos para protegernos adecuadamente de los rayos solares.

Un buen protector para los rayos solares

Usar protector solar.  Esta debería ser una acción diaria, incluso para quienes pasan la mayor parte del tiempo bajo techo y salen a la calle de forma ocasional.

El producto a usar debe ser específico, de acuerdo a ciertas variables. Por ejemplo, las personas con acné deberían aplicarse un gel. En la protección del  cuero cabelludo, se utilizan lociones capilares o aerosoles.

Si la exposición a los rayos solares es fuerte, deben emplearse protectores de amplio espectro, con factor de protección igual o superior a 30. Quienes practican deportes o actividades al aire libre, requieren soluciones que tengan mayor capacidad de protección de la radiación de los rayos solares.

La ropa más apropiada

Las prendas de vestir deben ser holgadas y tupidas, preferentemente confeccionadas en algodón. También se recomienda disponer de sombreros de ala ancha, con el objetivo de defender del sol orejas y el cuello.

sol

Gafas de protección

Respecto a las gafas de sol, los especialistas oculares aconsejan que tengan un índice de protección de por al menos 99% frente a los rayos UVA y UBV. 

Ser precavidos, incluso en la sombra. Ocultarse bajo de un árbol o una sombrilla, no implica que la piel no pueda sufrir los efectos de una insolación si no se protege adecuadamente, sobre todo si está en la playa. El reflejo puede ser igual de dañino que la exposición directa, será una agresión “silenciosa”.

Beneficios del agua

Hidratarse. Hay que tomar abundante líquido, preferentemente agua. Aunque no seamos conscientes de ello, nuestro cuerpo necesita más agua con la llegada del calor y la mayor exposición a los rayos solares.

Fuentes imágenes: Mendoza Post  /   DiCYT


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