Las pantallas en los asientos de aviones han revolucionado la forma en que los pasajeros disfrutan sus vuelos. En la actualidad, las aerolíneas buscan mejorar la experiencia a bordo incorporando sistemas de entretenimiento de alta calidad, ofreciendo a los viajeros una variedad de opciones para hacer sus trayectos más amenos.
Historia del entretenimiento en vuelo
El entretenimiento a bordo ha evolucionado significativamente desde sus inicios. A principios del siglo XX, los pasajeros disfrutaban de experiencias rudimentarias, como libros y revistas. En 1921, se proyectó la primera película a bordo, ‘Howdy Chicago’, marcando un hito en la evolución del entretenimiento en vuelo.
Durante los años 60 y 70, comenzaron a aparecer los primeros sistemas de audio, con auriculares neumáticos que luego fueron sustituidos por electrónicos en 1979. Finalmente, la llegada de las pantallas individuales en 1988 con el Boeing 747 permitió a los pasajeros seleccionar su propio contenido, transformando la experiencia de viaje.
El auge de las pantallas individuales
Las pantallas en los respaldos de los asientos han sido durante años una de las principales fuentes de entretenimiento en vuelos de larga distancia. Dependiendo de la aerolínea y la clase en la que se viaje, estas pantallas pueden variar en tamaño, desde modelos más pequeños de 9 pulgadas hasta versiones de hasta 27 pulgadas en primera clase o business. Para un viaje cómodo, es fundamental conocer los accesorios de viaje imprescindibles.
Estos dispositivos suelen ser pantallas táctiles que permiten al pasajero elegir entre una amplia gama de contenidos, desde películas y series hasta música y videojuegos. Algunas aerolíneas incluso ofrecen la posibilidad de ver televisión en vivo, permitiendo a los viajeros mantenerse informados durante el vuelo.
Cómo funcionan los sistemas de entretenimiento en vuelo
El sistema de entretenimiento en vuelo, conocido como IFE (In-Flight Entertainment), está basado en un servidor central ubicado en el avión. Este servidor aloja el contenido multimedia y lo distribuye a las pantallas individuales mediante conexiones Ethernet. Además de esto, es recomendable conocer cómo preparar una maleta de viaje adecuadamente para llevar todo lo necesario.
Las aerolíneas personalizan estos sistemas según su branding y acuerdos con productoras cinematográficas, lo que significa que la oferta de entretenimiento puede variar según la compañía aérea con la que se viaje.
Alternativas a las pantallas en los asientos de aviones
Con la proliferación de dispositivos móviles, algunas aerolíneas están optando por eliminar las pantallas en los asientos en vuelos domésticos y de corta duración. En su lugar, ofrecen Wi-Fi a bordo y permiten a los pasajeros acceder a un catálogo de entretenimiento directamente desde sus smartphones, tablets o laptops.
Este cambio responde a varias razones:
- Reducción de costos: Instalar pantallas en los asientos implica costos elevados de mantenimiento y actualización tecnológica.
- Ahorro de combustible: Las pantallas agregan peso a la aeronave, lo que incrementa el consumo de combustible.
- Conectividad: Los pasajeros prefieren acceder a su propio contenido mediante sus dispositivos personales.
El futuro del entretenimiento a bordo
El futuro del entretenimiento en vuelo está ligado a la conectividad. Las aerolíneas están invirtiendo en Wi-Fi de alta velocidad para permitir transmisiones en streaming sin interrupciones. Además, algunas están explorando soluciones de realidad virtual y aumentada para ofrecer experiencias inmersivas a los pasajeros. También es recomendable saber cómo planificar un viaje sorpresa, algo que puede complementar la experiencia a bordo, como se detalla en cómo planificar un viaje sorpresa.
Otro aspecto clave es la personalización. Gracias a la recopilación de datos sobre preferencias de los pasajeros, las aerolíneas pueden ofrecer recomendaciones de contenido ajustadas a cada usuario.
Las pantallas en los asientos de aviones han evolucionado y, aunque algunas aerolíneas están considerando eliminarlas, siguen siendo una parte fundamental del entretenimiento en vuelos de larga distancia. Con la creciente conectividad a bordo y la posibilidad de acceder a contenido desde dispositivos personales, el entretenimiento en vuelo continuará transformándose para ofrecer una experiencia cada vez más personalizada y cómoda para los pasajeros.