Los helados son más que simples dulces. Gracias a su base de leche, son un alimento nutritivo.
Un helado puede contener calcio, proteínas y vitamina B2, que aportan beneficios para las etapas de la infancia y la adolescencia. Además, se recomienda incorporarlo en la dieta como un complemento alimenticio.
Aunque podemos integrar los helados en nuestra dieta diaria, no todo son ventajas. Hay que tener cuidado con las calorías que tiene, y contarlas como las de cualquier otro alimento.
Sabores, frescor…
Además de ser un alimento delicioso, los helados ofrecen la frescura y el sabor, ideales para los tiempos calurosos del verano.
Hay que evitar los helados a base de agua, que no aportan nutrientes y solo ofrecen calorías y colorantes, perjudiciales para nuestro organismo.
En la actualidad, han llegado al mercado algunos tipos de helado de bajo contenido energético, considerados como light.
Una lista de helados y sus calorías
- Polos: Son helados los clásicos, que pueden tener leche o no, y suelen tener trozos de frutas. Aportan 70 calorías por cada 100 gramos que de consumo.
- Conos, cornetes, etc.: Son aquellos, compuestos por una bola de helado, y una base de galleta en forma de cono. Estos contienen 300 calorías, y esta cifra aumenta si se le agregan bolas de helado.
- Yogurt: Son los helados a base de yogurt. Las calorías que contiene, varían según los extras que le agregues, sin embargo, posee un estimado de 300 calorías.
- Bombones: Son aquellos helados que están cubiertos de chocolate, con galletas, o almendras. Su textura suele ser cremosa, y posee un estimado de 340 calorías, por unidad.
- Emparedado helado: Son los que tienen el helado, entre dos piezas de bizcocho, o galleta, tipo sándwich. Estos poseen un estimado de 270 calorías, por unidad.
Es aconsejable revisar la envoltura de los helados, y tener en cuenta la cantidad de azúcar que poseen, estabilizantes, edulcorantes, conservantes, etc.
Fuentes imágenes: ABC de Sevilla / ABC.es