Christophe Lemaire se mantiene fiel a su estilo minimalista en su última colección, presentada en la Semana de la Moda de París.
En general, la propuesta está formada por piezas simples en tonos neutros, salvo unas pocas concesiones a los colores vivos y los estampados.
El diseñador francés busca el movimiento a través de telas ligeras y el empleo de un corte relajado (aunque sumamente preciso), acentuado con el uso de sandalias cangrejeras de piel y de ante en lugar de zapatos de vestir.
Camisas con mangas acampanadas, pantalones holgados, chaquetas largas y fluidas… Las prendas se separan del cuerpo, con la cintura como único ancla, algo que se perfila como la nueva normalidad a partir de ahora.
Lemaire confiesa que su inspiración ha sido la estética de las bandas alemanas de los años 70 y principios de los 80, con referencias directas a grupos como La Düsseldorf o Kraftwerk.
Lemaire juega con diferentes tipos de chaquetas, cuellos y mangas, yendo estas últimas desde tipo sisa hasta cubrir los nudillos en una gabardina. Una colección minimalista, aunque repleta de matices.
