Hay muchas formas de pasar unas vacaciones entretenidas, pero el mundo se divide en dos tipos de personas: los que prefieren bañarse en la playa y los que aman la montaña. Unos adoran el calor, el agua y el sol, mientras que los otros apelan al frío y la altura para aclimatarse.
Si miramos ambos lugares con objetividad, playa o montaña… ¿Cuál es la mejor opción?
Según estudios realizados, el agua y el mar resultan necesarios para crear los mejores estados de descanso y relajación. Sin embargo, esto no significa que la playa haya ganado la batalla. Quizá las personas que están acostumbradas a climas templados y calurosos ven el frío montañoso como una experiencia diferente.
En todo caso, lo que hay que saber son las ventajas e inconvenientes de ambos ambientes y su contribución a nuestro periodo vacacional.
Ventajas e inconvenientes de la playa
El mar ofrece un ambiente agradable en el cual podemos andar ligeros ropa y disfrutar de las maravillas del agua salada. Quien tiene la piel blanca se broncea. Se puede nadar de día e ir de fiesta de noche, lo que ofrece varias posibilidades para el disfrute.
Sin embargo, hay quienes no toleran bien el sol ni el agua salina. Aquellos que odian la sensación de la arena mojada seguro prefieren alquilar una cabaña ubicada en una zona montañosa.
Lo bueno y lo malo de la montaña
Como una alternativa a al mar, siempre ha surgido la fría y silenciosa montaña. Allí podrás escapar del calor y del ruido de la ciudad, lo cual es bastante reconfortante para muchos. En estos lugares disfrutarás de una gastronomía con productos que solo pueden cultivarse a bajas temperaturas. Montar a caballo será una actividad interesante.
Descubrirás que no es tan fácil practicar deportes de clima frío, debido a su alto nivel de peligrosidad y al coste de los complementos necesarios. Además, no todo el mundo está hecho para soportar el clima frío. Otras personas incluso se aburrirían entre tanto silencio.
A pesar de pros y contras, tanto la playa como la montaña son excelentes opciones. ¿Cuál elegirás?
Fuentes imágenes: Joya Life / Unifem