Cómo arreglar o eliminar tatuajes

Quizá muchos de los que en su día os hicisteis un tatuaje no os parasteis a pensar en que era para toda la vida. Amores rotos, trabajos cara al público o dibujos mal hechos son algunas de las razones por las que cada día hay una mayor demanda de la eliminación de tatuajes. Lo que en principio os parecía un adorno ideal para vuestra piel, se ha convertido en poco menos que una verruga. Y ahora esto, ¿cómo sale?.

A la hora de querer deshacernos de un tattoo existen dos vertientes: quienes quieren quitárselo porque no les gusta el motivo que se dibujaron o cómo fue dibujado, o aquellos que desean eliminarlo por completo.

El motivo principal por el que se quiere hacer desaparecer un tatuaje responde a cuestiones laborales. Determinados puestos cara al público exigen de nosotros una imagen de seriedad o de elegancia, muchas veces rota por una calavera en el cuello, o un alambre de espinos alrededor de la muñeca. En estos casos la opción es eliminar el tatuaje.

La opción más recomendable para borrarnos un tatuaje es la del láser, pero además de no ser la panacea, este tratamieto puede costar entre 700 y 6.000 euros, en función del tamaño del dibujo y de la zona donde éste se encuentre, de modo que ya podéis empezar a ahorrar, pues resulta verdaderamente caro. ¿Te acuerdas del precio del tatuaje cuándo te lo hiciste? Mejor no pensarlo a estas alturas.

Existen diferentes métodos de eliminación de tatuajes, como son la dermoabrasión, mediante la cual se eliminan las capas de la epidermis posibilitando que desaparezca el tatuaje; también la salabrasión o abrasión salina, que consiste en lijar la zona tatuada, pero en su lugar os quedará una magnífica cicatriz.

Otro método consiste en un estiramiento de la piel, que requiere una intervención quirúrgica, y que sólo se recomienda en pequeños tatuajes, ya que nos dejará una cicatriz lineal. Por último, la escisión, técnica por la cual se van cortando zonas de la piel en varias sesiones, y deja muchas cicatrices.

Visto lo visto, y teniendo en cuenta que muchos de las fórmulas anteriormente descritas responden más a prácticas carcelarias en cuanto a la eliminación de tatuajes que a otra cosa, diremos que el láser es el más efectivo, aunque no garantiza que la piel vaya a quedar como antes del tatuaje, pues es habitual que nos queden marcas o cicatrices.

La técnica es simple. Como podéis apreciar en el vídeo, los haces de luz del láser actúan sobre los pigmentos y los elimina. Los más difíciles de eliminar son los tatuajes de color, y también influye la cantidad de tiempo transcurrido desde que nos tatuamos, que en este caso juega en nuestro favor. Los tattoos más viejecitos son los más fáciles de quitar.

En cuanto a colores, los tatuajes de color negro, azul oscuro y rojo se eliminan muy bien, y pueden desaparecer en tan sólo cuatro sesiones. Los de color azul claro, verde, morado y naranja, sólo desaparecen parcialmente, y necesitaréis unas ocho sesiones, mientras que si tenéis tatuajes de color amarillo, ya podéis echaros a temblar, pues son los más difíciles y no responden con éxito al tratamiento.

Los impactos del láser son muy molestos, pero las sesiones duran poco tiempo, de modo que no se trata de un tratamiento muy desagradable. Tras varias exposiciones, algunos tatuajes se eliminarán por completo, mientras otros darán al enrojecimiento de la piel de la zona que deberemos tratar con pomadas antibióticas y cremas regeneradoras.

Eso, en cuanto a hacer desaparecer nuestro tatuaje. Pero si lo que nos ocurre es que nos tatuó un tuerto, tenemos una frase de amor caducada con nombre de destinataria incluido, contamos con un magnífico y «cantoso tattoo taleguero», o el dibujo o mensaje ya no nos gusta, lo mejor es usar la técnica «Cover up» o cobertura, que consiste en tatuar un nuevo motivo sobre el ya existente, que lo camufle por completo.

Es importante que, si decidimos hacer esto, acudamos a un buen estudio de tatuaje, donde verdaderos artistas de esta técnica nos aconsejen al respecto y nos hagan diferentes propuestas posibles que nos contenten y eviten que volvamos a equivocarnos. Hay ejemplos increíbles sobre este tipo de técnica de cobertura, ahora sólo tienes qué ver si tu indeseable tatuaje se ajusta a los parámetros necesarios para ser camuflado.

¡Ah!, un último apunte: se ofrece en Internet una pomada «milagrosa» que promete eliminar los tatuajes posibilitando que la tinta sea absorbida por nuestro organismo y eliminada gracias a nuestro sistema inmune. No tengo ni idea de si es fiable o no, pero lo cierto es que si funcionara ya nos la estarían, incluso, anunciando por televisión.

Debéis ser conscientes del riesgo que entraña comprar este tipo de productos en la Red, de modo que si pretendéis comprarla, lo mejor es que antes consultéis con vuestro dermatólogo, pues no creo que cumpla con los requisitos sanitarios establecidos en España.


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.